El olivo y el acebuche son dos especies de árboles parecidas que se pueden distinguir por sus diferencias en distribución, tamaño, fruto y hojas.
Hoja y Tamaño:
A pesar de que los dos tienen unas hojas similares, las del olivo son más grandes y largas, mientras que las del acebuche son más cortas y delgadas.
Por otra parte, mientras que el olivo puede llegar a medir 15 metros, el acebuche se mantiene sin superar los 3 metros.
Frutos:
Por lo que más se diferencian el acebuche y el olivo son por sus frutos, siendo los frutos del olivo unas aceitunas de gran tamaño que contrastan con los pequeños frutos de color oscuro del acebuche.
Mientras las aceitunas del olivo son apreciadas por su uso en la producción de aceite, los pequeños frutos oscuros del acebuche, llamados acebuchinas, tienen un sabor amargo y astringente, aunque no se aprovechan de la misma manera.
Debido a su sabor, estas acebuchinas suelen ser empleadas para elaborar aceitunas encurtidas, productos locales (mermeladas, salsas o aderezos), y hasta le han dado usos medicinales gracias a sus propiedades naturales.
Acebuche Olivo
Corteza y Forma:
La corteza rugosa y escamosa del acebuche contrasta con la lisa del olivo. Mientras que el olivo a menudo se cultiva para una forma simétrica, el acebuche adopta formas irregulares y serpenteadas.
A pesar de que el acebuche sea sensible a las heladas, muestra mayor resistencia a climas secos y suelos menos fértiles que el olivo, siendo más adaptable a entornos salvajes.
Por su parte, el olivo se encuentra principalmente en zonas llanas de cultivo, al contrario que el acebuche, que está disperso entre matorrales.
Acebuche
El acebuche destaca por su capacidad para adaptarse a suelos pobres, convirtiéndose en una herramienta valiosa en programas de reforestación y conservación.
Estos acebuches son capaces de capturar dióxido de carbono de la atmósfera y de prevenir la erosión del suelo, siendo por ello unos árboles de gran ayuda en la preservación del medio ambiente.
Olivo
Uso del olivo en la producción de aceite de oliva:* El olivo es apreciado en todo el mundo por la elaboración del aceite de oliva a partir de sus frutos.
Y no solo eso, sino que además de ser destacado en la cocina mediterránea por el sabor que aporta a los platos, también es apreciado en la cosmética gracias a sus propiedades nutritivas.
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